Tiene un hombre también. Un hombre que es frío y distante. Cuya voz derrama autoridad. Y cuyos perforadores ojos grises ocultan secretos, y tal vez permanecen en su rostro por un segundo demasiado largo.
Willow no se supone que mire profundo a esos ojos. No se supone que ella intente leer sus emociones apretadamente atadas. Y tampoco se supone que ella se toque en la noche, imaginando su poderosa voz y ese frío, pero hermoso rostro.
No, Willow Taylor no debería estar atraída a Simon Blackwood para nada.
Porque ella es una paciente, y él es su doctor. Su psiquiatra.
El hombre medicina.
Advertencia: Este libro discute problemas sensibles incluyendo, pero no limitado a, depresión y suicidio.
Puedo descargarlo?
ResponderBorrarHola, ¿puedo descargarlo?
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